
Según Bill Clinton y la información recogida por la CNN, hay puesta en marcha una campaña intimidatoria contra los superdelegados del partido demócrata, que perjudica las opciones de su esposa en su carrera a la Casa Blanca.
"No lo puedo creer. Es desesperada la manera en que ellos tratan de empujar, presionar e intimidar a todos los superdelegados para que se posicionen", ha afirmado Clinton.
El ex presidente sugiere que alguien está intentado encubrir las opciones reales que Hillary Clinton tiene de ganar en Estados clave que los demócratas deberán obtener en las elecciones generales en EE.UU..
Para el marido de Hillary las cosas están claras. Si su esposa no es en noviembre la candidata del partido, las posibilidades de que los demócratas ganen se diluyen.
Bill Clinton se ha mostrado muy crítico sobre cómo estaba transcurriendo el proceso de primarias, en el que ha asegurado que su mujer no estaba teniendo el respeto que merecía como una postulante legítima a la presidencia.
Además, en su persistencia de demostrar que su mujer no se ha rendido, recalca que si Hillary gana en Montana y en Puerto Rico, logrará estar por delante en el voto popular cuando las primarias terminen.